2.2 Simbolismo

El blanco es un color cargado de sentido. Para la física es la suma de todos los colores. Según el Diccionario de Símbolos de Jean Chevalier[1], el blanco es el color iniciador, es el pasaje de la mutación del ser de la muerte al renacimiento, es el de la indiferenciación original, es el del segundo nacimiento de la mujer al casarse, es el de la leche potencial vital, es el de la pureza que muestra que nada aún se ha cumplido, es el del silencio absoluto del alba que actúa sobre nuestra alma, es el de las ropas de los poetas y los druidas celtas. Y es el de la camisa de los que van a ser sacrificados, “que es una camisa de sumisión y disponibilidad, como lo es también el vestido de la novia que se encamina hacia su boda”[2].



[1] Jean Chevalier. Diccionario de Símbolos. Barcelona: Editorial Herder, 1986. p. 189-192

[2] ibid. p. 191.